Lubina a la marinera

Después de unos merecidísimos días de descanso ya estamos de vuelta ;).

Que tal os ha ido todo?  Os habéis ido a algún sitio?  Nosotros hemos aprovechado para irnos con unos amigos a Estambul... Creo que no he visto a tanta gente junta en mi vida!!! y no de turistas precisamente, si no de turcos! (por algo es la tercera ciudad más poblada de Europa).

Hay muchas cosas que me han sorprendido de Estambul, su cultura,  las llamadas de los musulmanes a las mezquitas, el ritual de lavarse los pies y las manos antes de entrar en ellas, lo limpias que están sus calles sin tener papeleras cada dos metros como tenemos aquí, el tráfico, los taxistas locos que se hacen llamar Schumacher, su delicioso té de manzana, su rabiosa ensalada picante de aspecto inocente...  En fin, nos traemos un puñado de anécdotas divertidas difíciles de olvidar.

La receta que os traigo hoy no es turca, aunque podría serlo por el maravilloso pescado que tienen allí... Es una lubina a la marinera que desde hace tiempo hago con bastante frecuencia en casa porque nos encanta.  Si no os gusta la lubina o no encontráis en ese momento, podéis sustituirla igualmente por una dorada, queda igual de bien.

Es una receta fácil con un resultado excelente, pero como siempre el resultado variará en función de la materia prima.  Comprar un buen pescado es básico y te aseguro que sale barato si en lugar de comerlo en casa vas a un restaurante.   

Mi chico y yo solemos homenajearnos el fin de semana.  Nuestro finde empieza el viernes por la noche, con una pizza casera y olvidándonos de la dieta por un par de días ;).  

A los dos nos encanta comer bien y disfrutamos comiendo acompañándonos siempre por un buen vino, luego, entresemana, nos matamos yendo al gimnasio o corriendo por la playa y comiendo mucha plancha y lechuguino (dícese de la triste lechuga).  Así es la vida!!! una de cal y otra de arena... jajajaa.

Este plato lo hago siempre con la thermomix, si de por sí ya es fácil, imaginaos con la maquinita!!!

Ingredientes:

- 1 lubina grande o 2 de ración (cortada a rodajas)
- Un puñado de almejas
- 2 tomates
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de piñones
- 1 limón
- 200 ml. de caldo de pescado
- Perejil
- Aceite de oliva, sal y pimienta.

Preparación:

Precalentamos el horno, 180º.  

Ponemos las almejas en un bol con agua y sal para que suelten la arena.

Salpimentamos el pescado y lo regamos con zumo de limón. Regamos los tomates con un hilo de aceite y los sazonamos.  Horneamos todo unos 8 minutos.

Echamos en el vaso de la Thermomix los ajos, los piñones y el perejil, picamos 10 segundos, velocidad 4.  Acabado el tiempo programamos 5 minutos a 100º, velocidad 2.

Agregamos al vaso el tomate asado y pelado y lo troceamos unos segundos a velocidad 4.  Añadimos el caldo de pescado y programamos 4 minutos a 100º, velocidad 2. 

Acabado el tiempo repartimos el pescado y las almejas entre el cestillo y el recipiente varoma y programamos 15 minutos, temperatura 100º, velocidad 2.

Acabado el tiempo, retiramos el pescado y comprobamos si las almejas están abiertas, de lo contrario deberíamos dejarlas más tiempo y separarlas para que puedan abrirse con facilidad.

Para espesar la salsa programa 5 minutos más, temperatura varoma, velocidad 2.

Si quieres hacerlo de la forma tradicional, olvídate de velocidades y temperaturas y usa tu intuición siguiendo los pasos.  Puedes hacer el pescado en la misma cazuela donde hagas la salsa, pero cuidado, el pescado es delicado y no admite mucho "meneo", hazlo suavecito ;).

Bon appétit! ;)